El viernes 28 de noviembre leí en El País un artículo de Patxi López titulado "Renovar el pacto ciudadano". La verdad es que todo él no es más que un cúmulo de tonterías y mentiras, muy en la línea de a lo que nos tienen acostumbrados estos "progres" burgueses defensores a ultranza de que la explotación de los trabajadores por los capitalistas debe continuar. El artículo empieza con un canto al pacto constitucional del 78, el cual, según Patxi, significó la conquista de "nuestros derechos y libertades". Se le olvida a tan insigne político o quiere ocultar que esos derechos y libertades no dejan de ser puramente formales y que lo único que consagró el pacto del 78, en la línea de lo que venía sucediendo en España, fue que el capital continuó su marcha triunfante y consiguió que desde aquella fecha hasta hoy los derechos de los trabajadores fueran cercenándose imparablemente (y todavía no se puso fin a este proceso, bastando para convencerse de ello oír día sí y día también a los representantes del capital decir que hay que seguir profundizando en las reformas, lo que significa dar más facilidades para el ya consagrado despido libre imperante en nuestro derecho laboral). Y a este "logro", gracias a ese pacto, contribuyeron de forma impagable el autodenominado PSOE y también, seamos justos, el PCE, CC.OO y UGT. Nunca el gran capital estará lo suficientemente agradecido a esta gentuza.
Seguidamente, López nos recuerda que hoy, como ayer, estamos sumidos en una profunda crisis, con millones de personas abandonadas a su suerte por la derecha. El cinismo de este sujeto no conoce límites. ¿A caso su partido no modificó el artículo 135 de la Constitución, junto con esa "derecha" a la que dice denostar, para cumplir con las exigencias de los capitalistas de que lo primero es garantizarles a ellos, a costa de lo que sea, el pago de los intereses por el dinero que prestan al Estado? ¿Y no ha sido eso lo que ha llevado al paro a millones de personas? ¿Y no ha sido eso lo que ha llevado al recorte drástico de las prestaciones por desempleo, de los servicios públicos, de los salarios? ¡¡Cómo se puede ser tan caradura!!
Después empiezan las propuestas. La primera es una propuesta de pacto a la sociedad española "porque todos tenemos problemas y son parecidos". El cinismo y la sinvergonzonería aumentan a cada párrafo. ¡¡Cómo se atreve a hablar en primera persona del plural!! Pero, Patxi, ¿qué problemas tienes tú y en qué se parecen a los de los millones de parados que no tienen perspectiva de empleo alguna porque tienen más de 40 años? ¿En qué se parecen tus problemas a los de una familia en la que ninguno de sus miembros tiene ingreso alguno?
Luego sigue con una alternativa económica que tiene entre sus "brillantes" ejes el de "ayudar a los empresarios que sí creen riqueza. A los trabajadores que estén dispuestos a participar con su esfuerzo personal en el progreso colectivo". Definitivamente, el cinismo de este tipo no conoce límites. Cómo si no supiese que los empresarios, los capitalistas crean riqueza para sí mismos, para poder seguir invirtiendo y obtener más beneficios y así sucesivamente. Y esto ¿cómo lo hacen?: Explotando todo lo que pueden y a todos los que pueden. ¡Y este todavía dice que hay que ayudarlos! Y no solo eso, sino que los trabajadores tienen que esforzase en ello, por que eso es, según él, el "progreso colectivo". Lo malo de todo esto es que habrá millones de, no sé como llamarlos, que se lo crean. Ya lo veremos en las siguientes citas electorales.
Otra "gran idea" es "blindar los servicios públicos universales", pero no dice cómo. Habla de "solidaridad". ¿De quién, Patxi? ¿De Soros, del Banco de Santander, de FCC, de Acciona?
Y, pasmémonos, después de varias tonterías más por el estilo, termina así: "Si tú estas dispuesto a cambiar el mundo habrá una silla esperándote en cada plaza de nuestros pueblos para que puedas participar con el PSOE en amasar juntos una nueva esperanza". ¡Y este y otros muchos como él son los que llaman populistas a Podemos! Por cierto, que eso de participar en las plazas, pero no cómodamente sentados en una silla como vais a hacer los del PSOE, ya se le ocurrió antes a los de Podemos.
En fin, al que quiera leer cosas como las que aquí comento y más, le recomiendo la lectura del artículo de Patxi. Ahí vera que, en el mejor de los casos, a lo único que aspiran esos que se llaman "socialistas" es a menear la mesa de algún epulón para ver si cae alguna migaja más. ¡Qué asco!
Seguidamente, López nos recuerda que hoy, como ayer, estamos sumidos en una profunda crisis, con millones de personas abandonadas a su suerte por la derecha. El cinismo de este sujeto no conoce límites. ¿A caso su partido no modificó el artículo 135 de la Constitución, junto con esa "derecha" a la que dice denostar, para cumplir con las exigencias de los capitalistas de que lo primero es garantizarles a ellos, a costa de lo que sea, el pago de los intereses por el dinero que prestan al Estado? ¿Y no ha sido eso lo que ha llevado al paro a millones de personas? ¿Y no ha sido eso lo que ha llevado al recorte drástico de las prestaciones por desempleo, de los servicios públicos, de los salarios? ¡¡Cómo se puede ser tan caradura!!
Después empiezan las propuestas. La primera es una propuesta de pacto a la sociedad española "porque todos tenemos problemas y son parecidos". El cinismo y la sinvergonzonería aumentan a cada párrafo. ¡¡Cómo se atreve a hablar en primera persona del plural!! Pero, Patxi, ¿qué problemas tienes tú y en qué se parecen a los de los millones de parados que no tienen perspectiva de empleo alguna porque tienen más de 40 años? ¿En qué se parecen tus problemas a los de una familia en la que ninguno de sus miembros tiene ingreso alguno?
Luego sigue con una alternativa económica que tiene entre sus "brillantes" ejes el de "ayudar a los empresarios que sí creen riqueza. A los trabajadores que estén dispuestos a participar con su esfuerzo personal en el progreso colectivo". Definitivamente, el cinismo de este tipo no conoce límites. Cómo si no supiese que los empresarios, los capitalistas crean riqueza para sí mismos, para poder seguir invirtiendo y obtener más beneficios y así sucesivamente. Y esto ¿cómo lo hacen?: Explotando todo lo que pueden y a todos los que pueden. ¡Y este todavía dice que hay que ayudarlos! Y no solo eso, sino que los trabajadores tienen que esforzase en ello, por que eso es, según él, el "progreso colectivo". Lo malo de todo esto es que habrá millones de, no sé como llamarlos, que se lo crean. Ya lo veremos en las siguientes citas electorales.
Otra "gran idea" es "blindar los servicios públicos universales", pero no dice cómo. Habla de "solidaridad". ¿De quién, Patxi? ¿De Soros, del Banco de Santander, de FCC, de Acciona?
Y, pasmémonos, después de varias tonterías más por el estilo, termina así: "Si tú estas dispuesto a cambiar el mundo habrá una silla esperándote en cada plaza de nuestros pueblos para que puedas participar con el PSOE en amasar juntos una nueva esperanza". ¡Y este y otros muchos como él son los que llaman populistas a Podemos! Por cierto, que eso de participar en las plazas, pero no cómodamente sentados en una silla como vais a hacer los del PSOE, ya se le ocurrió antes a los de Podemos.
En fin, al que quiera leer cosas como las que aquí comento y más, le recomiendo la lectura del artículo de Patxi. Ahí vera que, en el mejor de los casos, a lo único que aspiran esos que se llaman "socialistas" es a menear la mesa de algún epulón para ver si cae alguna migaja más. ¡Qué asco!
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