Ir al contenido principal

Edurne Uriarte (o cualquier otro "santon" como ella).

Toda esa tropa de "santones" y "buenopensadores" que escriben en la prensa oficial (ABC, El País, La Razón, El Mundo, La Vanguardia, etc, etc), lógicamente sirven a los intereses de la clase que les paga, es decir, que los explota; de otra manera, ya no escribirían o, desde luego, no en dichos medios. Son gente que claro que saben lo que dicen y porqué lo dicen; y quiero decir con ello que saben muy bien a qué intereses sirven y cuáles son esos intereses: los de clase y los de partido. En este caso, he escogido a Edurne Uriarte y su artículo de ABC del sábado 24 de mayo, pero podría valer cualquier otro, como por ejemplo, Joaquín Estefanía y lo que escribe en El País. Empiezo por los intereses de clase. Qué duda cabe de que Edurne Uriarte y todos los demás "santones" son perfectamente conscientes de que el sistema capitalista, si por algo se caracteriza, es por la libertad de explotación; es, ciertamente, su LIBERTAD, así, en mayúsculas, palideciendo frente a esta todas las demás que la burguesía dominante ha concedido (expresión, prensa, de movimiento, etc). También saben, porque saben historia y son gente documentada, que inevitablemente el capitalismo, en el mejor de los casos, causa y seguirá causando crisis como esta, cuando no guerras (la de 1914, USA-Irak); una desigualdad brutal cada vez más agudizada; hambre en una parte cuantitativamente importante del planeta; todo esto lo saben esos "santones" y, sin embargo, llevan años escribiendo y pontificando con la úinica finalidad de mentener el engaño de que este es el mejor sistema posible y de que, con algunos retoques, puede tener arreglo, cuando saben de sobra que se haga lo que se haga, al cabo de unos años, volverá a haber otra crisis y volveran a decir cómo se tiene que arregar (1). Y esperemos que solo sea una crisis y no algo peor, como ocurriría en el caso de que los capitalistas de un lado decidan que pueden asestar un golpe definitvo a los del otro, es decir, el caso de la primera guerra mundial; o que el ascenso de partidos populistas, racistas y xenófobos al albur de esta crisis brutal no lleve al encumbramiento, meddiante el voto de una clase explotada y totalmente desnortada, de algún lider tipo Hitler, acreditado capitalista.
Pero la Sra. Uriarte y todos los demás sicarios del capitalismo siguen a lo suyo, pues aún siendo como son unos explotados, les va muy bien en este sistema y no parece que vean peligrar sus ingresos y nivel de vida y, aunque lo vieran ¿qué otra cosa podrían hacer? ¿Ponerse a predicar contra el capitalismo? ¿Aprovechar sus conocimientos y posición para desenmascarar a esto que los capitalistas llaman "democracia"? Evidentemente no, pues se irían a la calle inmediatamente.
Sigo ahora con los intereses de partido. La Sra. Uriarte se refiere al PSOE como los "socialistas". Aquí se sitúa no en una perspectiva de los intereses de clase (la analizada anteriormente) sino de partido. Como le interesa defender al PP (nos  advierte de lo malo que es votar a los "socialistas") escribe como si ciertamente el PSOE fuera un partido "socialista", cuando la Sra. Uriarte sabe de sobra que el PSOE en particular (el SPD alemán mucho antes) ya no es un partido "socialista" desde que el gran traidor (Felipe González y su camarilla) propoció el abandono del marxismo, pasando, así, a ser un partido burgués más, exactamente igual que el PP o, creo, cualquier otro partido del arco parlamentario español. El PSOE tiene, por tanto y en esencia, el mismo programa económico que el PP: hacer lo que dicten los "mercados" -gran eufemismo por "capitalistas"-. La única diferencia es que el PSOE (con la inestimable colaboración de unos sindicatos entreguistas) aspira a que de la mesa del rico Epulón, este deje caer alguna migaja más, cosa a la que no parece muy dispuesto el PP. Pero como a Edurne Uriarte le interesa que no gane el PSOE (a los capitalistas les da exactamente igual -acordaros de aquella impagble foto en la que se veía Botín y a Zapatero en mangas de camisa como dos auténticos colegas-), pues escribe como si la alternativa al PP fuera el coco del "socialismo"; y dado que a ABC le viene bien tal falso debate para intentar vender más periódicos que su rival de "izquierdas", El País, pues ahí tenemos a la Sra. Uriarte manteniendo el engaño en las páginas de dicho rotativo. Y si ahora nos fuésemos a El País y a los "santones" que escriben en dicho medio, pues ocurre exactamente lo mismo. En cuanto a los intereses de clase, ya lo dije más arriba; en cuanto a las diferencias PSOE-PP, en este periódico se tilda a la política del PP como de "derechas", "conservadora", "reaccionaria", en contraposición a la de "izquierdas" y "progresista" del PSOE, cuando, al igual que la Sra. Uriarte, todos los que escriben en El País, saben que los dos partidos estan de acuerdo en lo fundamental: mantener al precio que sea y mediante todo tipo de engaños la libertad de explotación. (Hay quien dice que el PSOE está perdiendo el favor de El País, que se está pasando al PP; no sé).
Para poner fin a esta monumental situación de engaño, que, obviamente, no se da solo en España (¡¡los republicanos llaman "socialista" a Obama!!), resulta mas que patente que en el occidente "capitalista" hace falta un gran partido de clase, es decir, un gran partido que proponga, para empezar, abolir conceptos tales como los de "ciudadano" (que tanto gusta al PP y al PSOE), "español", "francés" o "alemán", la referencia a "pueblo", a "España" a "Polonia" y se centre en los intereses de los explotados, donde quiera que estos se encuentren. Este sería un primer paso para, poco a poco y hasta la llegada del momento final, ir acabando con esta lacra que es el capitalismo.




(1) Sería un ejercicio interesante ver qué escribían todos ellos en las crisis anteriores a esta.

Comentarios

Entradas populares de este blog

Echenique, "Atarse los cordones" y los Círculos.

La Secretaría de Organización de Podemos lanzó la campaña "Atarse los cordones" (podría haberse llamado "Descubriendo el Amazonas", pero bueno), la cual viene precedida de rotundas afirmaciones sobre la necesidad de una la vuelta a los orígenes y de reactivación de los Círculos. Es una obviedad decir que esto trae su causa en que hay gente dentro de PODEMOS que piensa que el partido o el movimiento se ha ido alejando de esos orígenes y que los Círculos, como "alma mater", han ido perdiendo tal carácter. Entiendo que es así y, por eso, dentro de la campaña de "Atarse los cordones", aquí va lo que pienso en torno a los Círculos. Los Círculos son el punto de encuentro de la parte de la sociedad civil que se pone en movimiento con el propósito de transformar la realidad que viene impuesta por un sistema económico, el capitalista; y ello, en la medida en que a este la única libertad que de verdad le importa es la libertad de explotación de los seres

Sami Naïr: al sevicio de su amo.

El pasado día  15 de noviembre publicaba El País un artículo  de Sami Naïr titulado "Inmigrantes comunitarios". El autor comenta la reciente sentencia del Tribunal de Justicia de la Unión Europea que daba por buena una decisión del gobierno alemán sobre los no-derechos de una ciudadana rumana que solicitaba el acceso a los derechos sociales, pese a que rechazaba buscar un trabajo. Según Sami, esta sentencia servirá de justificación a una ley que parece va a aprobar el Bundestag que permitirá la expulsión de ciudadanos comunitarios que hayan perdido su empleo durante seis meses, a la vez que, vaticina el sagaz Sami, obligará a estos a aceptar cualquier condición laboral si no quieren ser expulsados del país. Todo lo cual, y alguna consideración más sobre los desastres de la política de austeridad impuesta por Merkel, lleva al articulista a lamentar el fracaso de la Europa social dado que "los europeos no han sabido ponerse de acuerdo sobre una base social mínima que permi

El capitalista Pedro Sánchez y los símbolos.

Muchos años después de aquel nefasto congreso en el que el P$o€, a iniciativa del abyecto Felipe González y de toda la camarilla que gobernaba el partido (salvo alguna honrosa excepción como la de Gómez Llorente), abandonara los principios marxistas, ahora empiezan, aunque sea tímidamente, a utilizar nuevos símbolos, quizá con vistas a ir olvidando progresivamente los antiguos símbolos. Ya había dejado de lado, incluso, lo de ser de "izquierdas". Pese a lo que todavía podía verse no hace mucho en algún escenario, eso de "Somos la izquierda", Sánchez ya había empezado a decir que eran un partido de "centro izquierda". Finalmente, ahora, a imitación de PODEMOS empiezan a introducir un corazón. De momento, todavía es "rojo", pero espero que no pase mucho tiempo hasta que podamos verlo verde o marrón o, simplemente, dejemos de verlo, desaparezca. Muy lentamente, los principios, parte del discurso y los símbolos parece que van por el camino de llegar